Desde el viernes 20 de febrero al 21 de junio 2009, se puede apreciar en la Sala de Exposiciones Temporales del Centro León, la exposición Wifredo García: Peculiares obsesiones, que a través de 191 imágenes entrega la más amplia muestra de la obra fotográfica de este artista del lente que se haya visto hasta hoy.
Como parte de las actividades paralelas a la exposición, el Centro León se trasladó a Santo Domingo para realizar el conversatorio Wifredo García: La trascendencia de una obra, que abordó uno de los aspectos principales dentro de la trayectoria de este reconocido fotógrafo.
El encuentro se realizó el pasado jueves en el Centro Cultural de España y contó con la participación de reconocidos críticos de arte, como Marianne de Tolentino, Amable López y Carlos Acero, quienes analizaron la significación de la obra de Wifredo García en el panorama de la historia de la fotografía dominicana y su importancia para el arte nacional.
La actividad fue moderada por Sara Hermann, Asesora de Artes Visuales del Centro León, quien hizo referencia a la muestra expositiva mediante una breve descripción de los elementos que comprenden esta exhibición fotográfica, al tiempo que resaltó los ejes principales en que se sustenta, como son los temas relativos al entorno, las rutinas, el esparcimiento, la cotidianidad, las costumbres y tradiciones, representados en las obras del artista para navegar por las interioridades de la socialización dominicana.
Este panel inició con la intervención de Marianne de Tolentino, quien expuso sobre la figura de García como humanista, intelectual y artista, durante su ponencia titulada Wifredo García único e irrepetible.
“Wifredo García: imágenes insaciables”, fue el segundo tema tratado en el encuentro, donde el panelista Amable López Meléndez planteó cómo el conocimiento y rigor técnico del artista, sumado a la reflexión crítica de la realidad motivaba el acto fotográfico y que “sin Wifredo, el paisaje fotográfico como lo conocemos hoy, hubiera sido imposible”, apuntó.
Según el experto en arte, estas consideraciones se basan en una entrevista que le hiciera a García poco antes de morir y en extractos de un encuentro, posterior a su fallecimiento, con Hortensia, esposa del artista.
Este encuentro finalizó con la participación de Carlos Acero Ruiz, quien abordó algunos aspectos relacionados a la vida del artista, la trascendencia y contemporaneidad de su obra, enfatizando en su análisis que con García se inicia el uso de vocablos conceptuales y formales nunca antes presentados en el discurso de la fotografía dominicana.
