Apuntes tomados durante la introducción a la sesión Arte en Proceso celebrada el pasado 18 de mayo, Día Internacional de los Museos. La visita del artista puertoriqueño Carmelo Sobrino a República ha sido posible por la colaboración del Grupo León Jimenes para la fase de preparación del XXI Concurso de Arte Eduardo León Jimenes.

Mi credo es el arte. Tengo un compromiso religioso con mi oficio. El artista es un ser dirigido por la conciencia que tiene sobre el prójimo y sobre la geografía espiritual y física de la región donde vive. El artista debe estar anclado profundamente en la conciencia de sus antepasados, de su lugar, de su presente… La materia prima del artista es la experiencia colectiva y espiritual que se ha generado entre cada una de las personas de su comunidad. Necesitamos hacer el banco de imágenes de nuestro tiempo, de nuestras raíces, de nuestro diálogo con los antepasados, con el entorno y sus circunstancias. El artista intenta afirmar y rescatar todo eso.
El arte se usa como herramienta para hacer un andamiaje de la condición espiritual del artista. Con el arte conseguimos vernos. El arte es una fuerza tan grande como el erotismo y la sexualidad, que es el juego del cuerpo y la mente. Pero el arte es el juego de la mente y el cuerpo. El arte nos afirma en nuestra memoria.
Platón dijo que la belleza es el resplandor de la verdad… y lo que el artista hace es rescatar esa belleza que resplandece sobre la verdad. El artista tiene la responsabilidad de dejar un asidero a las generaciones que vienen para que sigan cultivando la ilusión. El arte tiene la función de lograr un exorcismo colectivo porque libera el miedo que puede engendrarse en el pueblo.
El artista debe fijarse en el arte popular y en el arte que es producido por nuestros artesanos. Debe reflejar retratos e imágenes de la gente, de lo cotidiano, del sentir del pueblo, de la memoria colectiva. Una de las mejores maneras de lograrlo es a través del dibujo.
La contemporaneidad depende de la visión conceptual de uno sobre el medio. Toda técnica se puede ‘contemporaneizar’ poniéndola en el paso del tiempo presente. El dibujo sigue siendo, hoy por hoy, una excelente forma de ver el mundo actual. De ahí se puede pasar a otras técnicas como la xilografía que es el grabado en madera. La xilografía es una artesanía, modesta y muy rica a la vez…
Me siento feliz por haber podido venir desde Puerto Rico para hacer con artistas dominicanos una experiencia colectiva basada en clínicas sobre grabado. Gracias por ofrecerme esta oportunidad, este privilegio de estar en el Centro León, una institución sorprendente y fascinante donde se hacen foros sobre la forma como se va construyendo el patrimonio de una nación.

Centro León