Un encuentro realizado en coordinación con Omnimedia, el cual estuvo salpicado de anécdotas y comentarios de Freddy Ginebra, a propósito de su más reciente obra Celebrando la vida II.

“Soy un celebrador de la vida y un presentista profesional”, así se definió Freddy Ginebra en el marco de un conversatorio realizado el pasado miércoles en el Patio Caribeño del Centro León, en donde dio a conocer su libro Celebrando la vida II.

El ejemplar es una selección de crónicas que narran experiencias existenciales, escritas con la sencillez y jocosidad características de este polifacético autor, quien considera que el libro es un compendio de todas sus alegrías y tristezas.

Y es que el autor sostiene que no quiere escribir malas noticias “quiero celebrar la vida, al contar historias que puedan aportar algo y dejar una ventana abierta a la esperanza”, compromiso que se hace tangible en cuatrocientas cincuenta palabras que, de forma quincenal, publica en la revista Estilos de Diario Libre.

Rafael Emilio Yunén, Director General del Centro León, dio las palabras de bienvenida a la actividad y calificó a Freddy como “ese extraordinario ser humano que vive Celebrando la vida en muchas ediciones y situaciones distintas”, dijo.

Asimismo, Beatriz Bienzobas, directora de la Revista Mujer Única y ex directora de Estilos, expresó que este es “un libro de doble valor, el emocional y el artístico”, pues está conformado por 53 textos ilustrados con 53 obras del reconocido artista dominicano Paul Giudicelli, entre ellas, pinturas, dibujos, esculturas y cerámicas.

En ese sentido, Rafael Emilio Yunén destacó la importancia de este homenaje a Paul Giudicelli, en el ámbito personal, ya que era tío de Freddy; y en el artístico por ser su obra “Brujo disfrazado de pájaro”, ganadora del primer lugar al inicio del Concurso de Arte Eduardo León Jimenes en el año 1964, certamen a partir del cual surgió la idea de crear este centro cultural.

Celebrando la vida II es introducido por Jeannette Miller, quien define este libro como una “oportunidad de acercarnos al verdadero Freddy, a ese que esconde sus temores bajo una carcajada o una frase desconcertante; al que llora ante la muerte de un anciano que no conoce…y también es capaz de iluminar sus días ante la presencia de la niñez”.

En el encuentro, “el duende” recordó situaciones familiares, gustos, memorias, detalles de viajes y grandes debilidades, acompañado de la presencia de un grupo de seguidores, personalidades del ámbito artístico y cultural, quienes asistieron a esta actividad para compartir lo nuevo que trae como escritor.