Arqueología en la utopía; aproximación al Santo Domingo colonial. Fue la tercera conferencia presentada en el Centro León dentro de un ciclo de conferencias magistrales con especialistas en arqueología y artes visuales.
Ildefonso Ramírez, arqueólogo español de larga trayectoria, fue el tercer conferencista de la semana en el Centro León, quien presentó sus estudios de investigación sobre los asentamientos, hallazgos históricos y arqueológicos en Santo Domingo correspondientes al período de la colonia.
El invitado explicó que incorporó el concepto de utopía a su labor a través de textos escritos por el arquitecto e historiador dominicano Eugenio Pérez Montás y su referencia al libro Utopía de Tomás Moro.
«La utopía es el no ser y de cierta forma Santo Domingo es la ciudad no acabada, como su propia catedral, como el urbanismo y sus propias murallas», expresó el arqueólogo al admitir que, a pesar de ser un proyecto inconcluso, la forma en la que ha sido construida la Ciudad Colonial le da un carácter exclusivo y único.
Además, el especialista internacional explicó la división territorial que existía en lo que denomina Ciudad renacentista vitruviana de Santo Domingo en los años 1500 y cómo el ordenamiento urbano sigue el mismo patrón que otras ciudades europeas del mismo periodo. Estos hallazgos surgen a partir de los estudios arqueológicos desarrollados in situ en los últimos 10 años para su tesis doctoral.
La actividad, realizada en colaboración con la Academia Dominicana de la Historia, fue propicia para que Ramírez abundara sobre casos específicos de investigación como la Casa del Tapao y las ruinas del Monasterio de San Francisco.
Sobre el facilitador
Ildefonso Ramírez es arqueólogo por la Universidad Autónoma de Madrid. Posee una especialidad en Prehistoria y Arqueología por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM ) y un doctorado en Arqueología por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
Lleva 30 años trabajando en arqueología urbana, una rama de esta disciplina que responde a la necesidad de actuar con cierta cautela en obras que pueden afectar al patrimonio arqueológico y arquitectónico.
