El Auditorio del Centro León revivió el trabajo del botánico sueco que se atrevió a escudriñar las entrañas de La Española.

Como parte de la celebración del Día Mundial del Medioambiente, El Centro León, en colaboración con el Jardín Botánico Nacional estrenó Reconocido pero desconocido, un documental sobre la vida y obra del botánico sueco Erik Ekman.
Las palabras de apertura estuvieron a cargo de Luis Felipe Rodríguez, Gerente de Extensión y Comunicación del Centro Cultural Eduardo León Jimenes; Milciades Mejía, director del Jardín Botánico Nacional; Claus Alin, a nombre del Instituto Ekman de Suecia y Anders Aberg, realizador del documental, quienes ampliaron sobre el invaluable labor que realizó Ekman durante su trayectoria de trabajo a la flora del Caribe.
Reconocido pero desconocido fue realizado por el cineasta sueco Anders Aberg, con la asistencia del doctor Roger Lundin del Museo Nacional de Historia Natural de Estocolmo. En la cinta de 50 minutos, se pudo apreciar la amplia investigación de Erik Leonard Ekman durante sus diecisiete años de trabajo botánico, trascendentales para el conocimiento de la flora del Caribe, en especial la de La Española.
La colección de botánica de Ekman llega hasta 35,712 números, 100,000 ejemplares y 55 especies nuevas, además de aves, mamíferos y reptiles que recolectó durante sus viajes. Entre ellas, 19,000 de Cuba y 16,000 de La Española, las cuales se suman con los duplicados recolectados a más de 150,000 especimenes.
Sus aventuras fueron más allá de las plantas y otros seres vivos. Y es que las rutas de sus expediciones lo ayudaron a ser protagonista de datos de importancia geográfica. Como la determinación de la altitud del coloso Pico Duarte, la elevación montañosa más grande de toda la isla y del Caribe, además de dibujar nuevos mapas de las montañas de Haití. Por esto, no es de extrañar que su nombre haya sido exaltado en el país y en sociedades reconocidas de la ciencia en el mundo.
Los últimos días de este intrépido botánico transcurrieron en Santiago de los Caballeros, donde hoy descansan sus restos en el Cementerio Municipal de la ciudad.

Rosanna Núñez